Se fue alejando poco a poco,
a merced de la marea
con la conciencia tranquila
y el corazón en guerra.
Se fue alejando poco a poco,
a merced del viento
sin mapa en sus bolsillos
sin orientación ni miedo.
Se fue alejando poco a poco,
a merced de una erosión
con la vida en sus entrañas
y un juguete de cartón.
Se fue alejando poco a poco,
a merced de su locura
sin trampa, traición,
culpa; sin cura.
Eloise J. Copperfield
No hay comentarios:
Publicar un comentario